Queriendo-ME

Existen personas que se ganan el cariño y el aprecio de quienes los rodeamos. Por ser sencillos, por ser apuntados, por ser tranquilos, por ser alocados, por ser graciosos, por ser personas que escuchan, por dejarnos caer o simplemente por estar siempre ahí.
Lo interesante es que si esas personas tienen la capacidad de ser así, ser especiales con los demás, ¿cómo son con ellos mismos? Más interesante aún, si esa superpersona eres tú, ¿cuánto de lo que das a los demás eres capaz de darte a ti mismo o a ti misma?
El equilibrio entre dar y darse es en muchas ocasiones muy difícil de llevar, porque en nuestro afán de escuchar, ayudar o acompañar a los demás, estoy vaciando mi fuerza dándola a los otros, y luego no puedo invertir tiempo en volver a llenarme de nuevo.
No quiero decirte que sea malo dar todo por los demás, lo que quiero decirte es que nadie puede intentar dar lo que no tiene. Hay personas que son expertas en escuchar, pero no se dan el chance de que las escuchen; que son buenas en acompañar pero al final del día se sienten solos; que hacen su mejor esfuerzo por dar un consejo y cuando se dan cuenta, aún sin esperarlo, el consejo que dieron estaba dirigido a ellos y ellas mismas.
Déjate amar por los demás, tú también necesitas ser escuchado de vez en cuando, y así te será más fácil descubrir nuevas palabras que compartir cuando alguien te llegue a buscar. Recuerda que queriendo-ME, podré querer y dar lo mejor de mi. PyB.
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